Paula Trespalacios Argain
Un panecillo saludable para niños neurodivergentes con trastorno del espectro autista (TEA) realiza la profesora – investigadora Carmen Lizeth del Toro Sánchez, del Departamento de Investigación y Posgrado en Alimentos.
En la emisión de este 2 de septiembre del programa “A tiempo con la ciencia”, del Departamento de Ciencias Químico Biológicas, abordó detalles de esta investigación que derivará en un producto atractivo y nutritivo.
Del Toro Sánchez, precisó que su investigación surgió a raíz de que no existe ningún producto enfocado hacia los niños del espectro autista, quienes casi siempre tienden a tener ciertas restricciones alimentarias o ciertas preferencias que llegan a adoptar por el mismo trastorno.
“En este tipo de trastornos se ha llegado a notar que los niños pueden presentar algunos problemas gastrointestinales, sobre todo por alimentos que son ricos en gluten, en caseína; entonces hay muchos trastornos así, sin embargo, son niños, e independientemente todos los niños van a preferir los carbohidratos y esto hace que no tengan una nutrición saludable”; compartió.
Además de evitar las enfermedades comunes por no tener una alimentación adecuada, como diabetes y dientes picados ante el exceso de azúcar; dijo buscan complacer las preferencias de texturas suaves, no rugosas con productos no llamativos.
“Nuestro enfoque en estas investigaciones es más en la parte alimentaria, nosotros queremos que estos niños, que a veces poco los entendemos, nosotros tratamos de entenderlos en la parte alimentaria, tratar de que con sus preferencias podamos darles un producto que ellos puedan consumir de manera saludable, de manera segura y a su gusto”, puntualizó del Toro Sánchez.
Aclaró que el producto que buscan elaborar no solo es para niños neurodivergentes, también para niños neurotípicos; será apto para cualquier persona, sin embargo, las especificaciones son más enfocadas en ser un panecillo libre de gluten y con antioxidantes.
Ingredientes
Del Toro Sánchez, quien es apoyada en esta investigación por una estudiante de Ciencias Nutricionales, detalló que los componentes en el panecillo que trabajan son de harina de garbanzo y harina de arroz, ambas libres de gluten, colágeno, bueno para los huesos y con capacidad antioxidante; arándanos, miel de agave, bajos en calorías y buenos antioxidantes.
Advirtió que estos niños suelen tener un poco más de desarrollo de compuestos malignos, los llamados radicales libres, compuestos oxidantes que van a dañar a células o tejidos porque no tienen una nutrición balanceada.
“Tratamos de hacer un panecillo que sea suave, estamos en una etapa de que vamos a hacer un análisis sensorial, darles a probar el panecillo para ver su aceptación o no aceptación, para ver si les gusta o no les gusta y nosotros tener una idea si se puede comercializar y dárselos de manera segura”, dijo.
“Estas alergias o estos tipos de padecimiento impiden que se absorban normalmente los nutrientes, aunado a eso necesitamos que estén libres de estos compuestos para que los nutrientes se puedan absorber de una manera positiva”, expresó la investigadora sobre la necesidad de ingredientes de fácil absorción que ayuden al paso intestinal con fibra que ayuda a que se regule la digestión.