Aleyda Gutiérrez Guerrero
Las empresas a nivel estatal y regional han encontrado fórmulas para mejorar y poder resistir, así como para tener capacidad de recuperarse rápidamente una vez que la contingencia haya sido controlada. Hay afectaciones significativas, pero están dando muestras de una resiliencia que permite pensar que pronto van a estar en las mismas condiciones que tuvieron previo a la pandemia, resaltó Álvaro Bracamonte Sierra.
El doctor en Ciencias Económicas señaló lo anterior al impartir la conferencia Impactos de covid-19 en las empresas del noroeste de México, donde señaló también que esta recuperación tiene mucho que ver con el carácter de las actividades predominantes en estas entidades, porque ha habido recuperación del empleo en la industria maquiladora, que incluso en algunos de los casos se reconvirtió, pues mucha de esa industria tiene que ver con la salud, con implementos médicos, y esos insumos se requerían con mayor celeridad.
Pero, aunque esto tiene un efecto positivo en el repunte de la actividad económica, no hay que descartar que influya en el incremento del número de contagios de covid-19, pues como hipótesis puede ser muy factible, reveló el profesor investigador adscrito al Programa de Estudios Transfronterizos de El Colegio de Sonora, y miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
El académico que tiene entre sus líneas de investigación economía y competitividad regional y sectorial, sistemas locales de innovación y cadenas globales de valor, participó en el II Congreso Internacional de Estudios de Posgrado en Ciencias Económicas y Administrativas 2020, organizado por la División de Ciencias Económicas y Administrativas, a través del Departamento de Administración.
El especialista y autor de varios libros compartió que el tema que desarrolló proviene de un estudio que nace a propósito de la coyuntura tan complicada que se registra a nivel internacional, nacional y local por la crisis sanitaria, que está afectando el desempeño de las empresas y todas las expresiones sociales en las que estamos inmersos.
Durante su conferencia, transmitida por la plataforma Teams, Álvaro Bracamonte recordó los antecedentes de la pandemia por covid-19 y su afectación, casos de contagios y destacó que esta crisis sin precedentes impacta en la economía mundial, porque todas las economías se encuentran en profunda recesión.
Mostró gráficas con la tasa de crecimiento económico por entidad federativa, pérdida de empleos entre marzo y octubre, y las proyecciones del Producto Interno Bruto, entre otras.
Reveló que los estados del noroeste mostraron la fragilidad económica, porque la tendencia es hacia el mercado externo, y dado que Estados Unidos registró una caída estrepitosa, por lo que los estados que tienen mucha vinculación con ese país mostraron la influencia que tuvo su caída.
Sin embargo, aunque hubo pérdidas en el mercado laboral en los estados en los que basó su estudio: Sonora, Chihuahua y Baja California, dijo que los tres en septiembre mostraron una recuperación importante de los empleos perdidos durante la pandemia.
Destacó que de estas tres entidades, Chihuahua en mayo se recuperó significativamente en este rubro y que fue aún más notable la recuperación de Baja California en ese mismo mes, mientras que Sonora tardó un poco más; sin embargo, destacó, esto muestra que los estados de la frontera han logrado una recuperación del mercado laboral más rápido respecto al sur de México.
Mencionó que estos resultados los obtuvo a partir de un par de encuestas que aplicó en Sonora como parte de un estudio que realiza en conjunto con el Grupo Interinstitucional de investigación (GIDI), que tuvo una primera fase en mayo, en la que contestaron 612 empresas, y una segunda fase en septiembre, en la que tuvieron respuesta de 534 empresas.
Informó que en este grupo participan investigadores de Sonora, Chihuahua, Tijuana, Nogales y Arizona, entre otros. Y durante su conferencia mostró los resultados del segundo levantamiento de encuestas, hecho en el mes de septiembre, cuyos resultados se exhibieron en los meses de octubre y noviembre.
En su intervención, Bracamonte Sierra hizo un desglose por sector al que pertenecen las empresas o industrias y algunas de sus características, destacando que la mayoría de las encuestadas son nacionales, y que la mayor parte se encuentran ubicadas en Hermosillo.
Para la encuesta, dijo, una pregunta importante fue si su actividad era esencial, porque eso las eximía del decreto de aislamiento y confinamiento, y de ahí se fueron analizando otros impactos en la fase de pandemia en la que se observó que el 44% ha tenido un efecto negativo y sólo el 1.3% tuvo un efecto positivo durante este tiempo.
El estudio también demostró que los impactos a raíz de la pandemia han sido varios, y algunos muy desfavorables, en especial porque no se sabe a ciencia cierta cuando va a terminar la contingencia y esto afecta a las empresas por la incapacidad de hacer planes, y a otras las ha obligado a un cierre forzoso, indicó.
Lo que ha llamado la atención, resaltó, es la capacidad de resiliencia y que algunas de ellas están recuperándose, por lo menos de acuerdo a lo que se observó con el empleo, que es muy notable quizás aún no tanto en Sonora, pero en Chihuahua y en Baja California sí.
“Lo que explica que las empresas puedan estar sobreviviendo en este contexto de pandemia es que han tenido que diseñar una estrategia de manejo de personal distinta, hacer ajustes en la operación de los negocios, han implementado nuevas tecnologías; es decir, están innovando, modificando su modelo de negocios, mejorando su capacidad para adaptarse y reduciendo costos”, señaló el integrante del consejo directivo del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología en Sonora (Coecyt).