En el marco de la conmemoración del Día Escolar de la No Violencia y la Paz, este 30 de enero, la Universidad de Sonora reitera el compromiso de formar profesionales con valores fundamentales, como son la tolerancia, solidaridad, el respeto a los derechos humanos y la paz, afirmó Raúl Guillén López, coordinador del Posgrado en Derecho.
“Nuestra casa de estudios tiene un compromiso social e institucional ineludible con la formación profesional y ética de sus egresados en sus diversos campus que abarcan prácticamente la totalidad de la entidad federativa”, sostuvo.
En general, Guillén López destacó la trascendencia de difundir la dedicación a este día y consideró que la Universidad de Sonora genera estudiantes con una formación ética y profesional y que, en sus elementos de enseñanza y orientación, fomenta en sus estudiantes la tolerancia, la solidaridad y desde luego el respeto a los derechos humanos.
Planteó que el escenario actual complejo que atraviesa el país y el estado de Sonora, hace necesario la formación de universitarios con una mejor preparación no solo en lo profesional sino también en lo ético.
En este sentido, afirmó que la Universidad de Sonora y el Posgrado en Derecho refrenda el compromiso de fortalecer la educación integral de los estudiantes y la exigencia al personal docente de continuar en las aulas y en el trabajo académico cotidiano de consolidar los valores de tolerancia, solidaridad, paz, entre otros, en la comunidad universitaria y sociedad en general.
Definitivamente, en todo estudiante debemos fomentar en la cultura de la paz y la no violencia; esto significa un compromiso social que nuestra institución universitaria cumple a fin de tener una mejor sociedad”, reiteró.
En este contexto, dijo que la División de Ciencias Sociales a través del Posgrado en Derecho no es la excepción, ya que la responsabilidad de dicha área es de suma importancia tomando en consideración que genera el recurso humano que participa y forma parte del sector privado y público.
“En el sector privado, por ejemplo, con diversos prestadores de servicio a nivel empresarial, gerencial y técnico, entre otros”, indicó.
“Y en sector público, desde servidores públicos de niveles altos como gobernadores, secretarios de estado, presidentes municipales, magistrados, hasta operativos policías, ministerios públicos”, añadió.
Fortalecer la educación
Por su parte, Maribel Solís Jusaino, coordinadora de la Unidad de Mediación Familia y Comunitaria del Posgrado en Derecho, expresó que el tema representa toda una historia que encierra una convocatoria hacia la acción voluntaria para impulsar y fortalecer la educación.
Reconoció que “la conmemoración surgió como una iniciativa pionera, no gubernamental, independiente y voluntaria que tiene como objetivo principal impulsar y fortalecer la educación en y para la tolerancia, la solidaridad, la concordia y el respeto a los derechos humanos de todas y todos”.
Por ello dio a conocer que desde la Unidad a su cargo procuran trabajar con una cultura para la paz, todos los días en los casos de las familias que atienden.“Desde el momento en que llegan, tratamos de brindarles ese confort, paz, tranquilidad para que puedan tomarnos la confianza y abrir su corazón a un diálogo, el cual se va a dar entre otra de las partes.
Fomentar valores
En cuanto a la cuestión escolar, comentó que es importante trabajar en el área de la mediación educativa y seguir fomentando los valores de la tolerancia, solidaridad y concordia, y trabajar en el ser humano, bondadoso y reflexivo.
Asimismo, advirtió, el trabajar en las habilidades sociales para la convivencia, asertividad, empatía y una comunicativa adecuada, la que precisamente dijo es donde los seres humanos a veces no sabemos conducir.
“Todo eso nos lleva a una formación con habilidades sociales para la convivencia”, reiteró Solís Jusaino.
“Apoyo esta fecha y cada día desde donde estemos para hacer algo en bienestar de esta cultura de paz”, expresó.
Educación libre
A su vez, Paloma Hernández Robles, académica de la Unidad de Mediación Familiar y Comunitaria del Posgrado en Derecho, destacó que es muy importante dar reconocimiento y conmemorar esta fecha ya que al hacerlo se sigue con la tarea de lograr una educación libre de violencia, sin discriminación y con perspectiva de derechos.
“De igual forma, propone utilizar un método alternativo para dar solución a los conflictos mediante el diálogo asertivo”, reiteró.
En igual forma mencionó cómo los centros educativos se convierten en instrumentos de paz y entendimiento entre personas de distinta formación, raza, cultura y religión.
Paloma Hernández también reconoció que una educación inspirada en una cultura de no violencia y paz permite a nuestro alumnado adquirir conocimientos, actitudes y competencias que refuercen su desarrollo como ciudadanos globales críticos y comprometidos con sus derechos y los de otras personas.
“También plantea diferentes contenidos, actitudes y competencias para trabajar este tema en función de la etapa educativa”, añadió.
Recordó que el Día Escolar de la No Violencia y la Paz, declarado por primera vez el 30 de enero de 1964, es reconocida por la ONU desde 1993.
“En esa fecha se conmemora la muerte de Mahatma Gandhi líder nacional y espiritual de la India, asesinado a tiros en 1948 por un integrista hindú”, concluyó.