Jesús Alberto Rubio/
La División de Ciencias Exactas y Naturales hizo entrega este día a la Dirección de Vinculación y Difusión de esta casa de estudios de una réplica de la máquina de Antiquitera (Antikythera) que tenía bajo su resguardo desde noviembre pasado, un dispositivo que se traduce en un mecanismo que pudo haber sido la primera computadora analógica en la historia de la humanidad.
Raúl Pérez Enríquez, académico del Departamento de Física, dio a conocer que la pieza, que calificó como una joya histórica de la tecnología y única en su tipo en México, llegó a esta institución en donación como resultado de un acuerdo de colaboración con la Universidad de Atenas, a través del profesor investigador Xhenophom Moussas.
Asimismo, dio a conocer que ese equipo se asignó para su resguardo a la División con fines de difusión científica a través de múltiples actividades dentro y fuera del campus universitario.
Recordó que como primera fase se acordó exhibirlo durante el mes de noviembre de 2018 en esta casa de estudios, así como en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y que luego el científico griego decidió donarla a ambas instituciones; primero, a la máxima casa de estudios sonorense.
En el acto formal de entrega, Pérez Enríquez dijo que las características del mecanismo, tanto en su diseño como conocimientos astronómicos y de materiales para producir engranajes, puede tener incidencia en muchos ámbitos de la Universidad.
“Ahora se sabe que esta pieza muestra un mecanismo de relojería muy sofisticado para aquella época, en la que representaba los conocimientos astronómicos de 100 años antes de Cristo”, indicó.
Un patrimonio científico
Rodolfo Basurto Álvarez, director de Vinculación y Difusión, destacó que ese mecanismo constituye un verdadero patrimonio científico que, además, permitirá la difusión de la ciencia en ese tema a través de diversos espacios y estrategias itinerantes educativas y culturales de la institución.
Planteó que la dirección a su cargo es el espacio adecuado de la institución para ampliar la estrategia de darlo a conocer a través de la Sala de Ciencias y el Programa de Divulgación y Difusión Científica/Tecnológica, bajo la coordinación del académico Narciso Navarro Gómez, quien mantiene enlaces permanentes con las diferentes unidades académicas universitarias.
Por su parte, Rodrigo Meléndrez Amavizca, director de la División, señaló que ese equipo significa una tecnología muy avanzada de su época, por todo el tipo de mecanismos de engranaje para predecir distintos tipos de eventos.
Además, afirmó que es muy positivo el hecho de que ahora quede bajo el resguardo y la operatividad de la Dirección de Vinculación y Difusión, para que se siga expandiendo el conocimiento en esa materia.
En la reunión celebrada a las 8:30 horas en la sala de juntas de la División, también intervino Julio Saucedo Morales, docente del Departamento de Investigación en Física, para señalar que la máquina de Antiquitera es parte de la historia de la civilización, “que tiene que ver también con el conocimiento griego y las culturas mesopotámicas, no sólo la parte científica, sino también la tecnológica expresada en los sistemas de engrane”.
El mecanismo, añadió, era una representación del cielo y de los movimientos; es la representación del máximo conocimiento astronómico, hasta ese momento, de la humanidad, dando a conocer que hasta el momento se han rescatado 27 engranes de la pieza y se han podido relacionar por el número de dientes y diámetro entre ellos.