Beatriz Espinoza//
Ante el nivel de percepción de inseguridad que prevalece en la sociedad, en todos los grupos sociales y, en especial, en los ambientes universitarios, es preciso elaborar nuestras propias medidas de seguridad, aseguró la especialista Alicia Hernández de Gante.
La académica e investigadora de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) habló de la Prevención Situacional del Delito durante su intervención en la 4ª Semana Nacional de las Ciencias Sociales y dijo que ésta es una teoría que explica la relación entre el delincuente y la víctima de un delito.
Explicó que ésta, la prevención situacional del delito, es la que nos habla de una relación intrínseca entre los delincuentes, los que cometen delitos aprovechándose de la ocasión y del momento para echar mano de sus acciones y los del otro lado, las víctimas que no tomamos las medidas necesarias, que no nos protegemos debidamente y, a veces, hasta nos exponemos de manera innecesaria.
“La prevención situacional no va a reformar ninguna legislación, ni va a suplir las responsabilidades que tienen las autoridades para velar por nuestra seguridad, pero si nos permitirá reflexionar hasta dónde nosotros podemos contribuir para evitar estar expuestos a ser víctimas de un delito”, estableció.
Comentó que en conjunto con otras instituciones, la BUAP realizó una investigación con estudiantes sobre la percepción de inseguridad en los entornos universitarios que no es un problema nuevo, y que tiene su antecedente en el 2011 cuando Anuies editó un manual de seguridad para las Instituciones de Educación Superior (IDES).
Alicia Hernández resaltó que la seguridad pública es responsabilidad de las autoridades de los tres niveles de gobierno a quienes socialmente se le recrimina su ineficiencia, pero hay que considerar también que la contraparte, la población, también contribuye a esta situación al ponerse en riesgo de convertirse en una víctima de delito.
“En primer lugar, porque no denunciamos y por las actitudes nuestras que nos hacen facilitar el delito, siendo susceptibles de situaciones que nos hacen ser víctimas por no tomar las medidas necesarias, por no protegernos debidamente, pues a veces nos exponemos de manera innecesaria”, afirmó.
La investigadora y docente de la BUAP planteó que es de reconocer la falta de capacitación y, a veces los acuerdos que hay entre los delincuentes y los cuerpos policiales, pero también existen los elementos en donde nosotros nos exponemos y no tomamos las debidas proporciones para no ser susceptibles de un delito.
En este contexto, dijo que no es que nosotros propiciemos los delitos, sino que la delincuencia por delitos del fuero común planea de acuerdo a las circunstancias que se viven y se observan en el ámbito universitario y por ello, está en nuestras manos, tomar las medidas pertinentes.
De acuerdo al desarrollo de la investigación que se realizó durante 2019 y quedó pendiente su seguimiento por la crisis de la pandemia por covid-19, la experta en el tema de seguridad pública dijo que falta desarrollar una cultura de prevención victimal, una conciencia de cuidado personal y grupal.
Añadió que los resultados muestran un alto grado de desidia y desinterés para cumplir protocolos y medidas de seguridad y, quienes han sido víctimas de delitos se mostraron muy confiados y poco precavidos.
“Los estudiantes son la base para desarrollar una cultura de la prevención, que comience en su casa, y termine en la sociedad apoyados unos de otro, con redes de confianza y ayuda mutua para disminuir, en gran medida, la inseguridad y el miedo que se llega a tener en nuestros propios lugares cotidianos de trabajo”, expresó.
Alicia Hernández dijo que es necesario unir esfuerzos para difundir las medidas de seguridad necesarias y evitar ser víctimas de delito por parte de las fiscalías, instituciones educativas, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, asociaciones civiles e incluso, observatorios ciudadanos.