Paula Trespalacios Argain
Para hablar sobre las perspectivas y expectativas de la economía mexicana, los académicos del Departamento de Economía, Francisco Cienfuegos Velasco y Javier Villegas Orpinela, fueron los invitados de la última emisión del programa radiofónico Economía y Sociedad.
Villegas Orpinela inició su intervención hablando sobre la inflación, la cual, según mencionó, ya se reportó dentro de los objetivos del Banco de México en la primera quincena de enero, ubicándose por debajo del 4 %. Esto, consideró, es una buena señal. Además, destacó la reciente presentación del Plan México, aunque señaló que es necesario esperar a febrero para evaluar la solidez de las amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
“Habrá que ver cómo evoluciona la actividad económica en este 2025. El gobierno federal ha realizado foros para el Plan Nacional de Desarrollo, y la presidenta Sheinbaum ha presentado el Plan México. Lo curioso es que lo presentan antes de que Donald Trump llegue por segunda vez a la Casa Blanca”, comentó el académico.
“Aquí hay un verdadero ataque por el lado de los aranceles, reforzado por el tema migratorio y la intención de nombrar a los cárteles como organizaciones terroristas. En este escenario, esos planes pasan a ser secundarios, así lo veo yo. Hay que estar atentos a lo que diga Trump y buscar acuerdos con su administración para reducir la incertidumbre”, advirtió.
“En estos días, los mercados financieros parecen estar tranquilos. El tipo de cambio no se ha mostrado nervioso, el dólar incluso ha bajado de precio, y la Bolsa, que al inicio del año estaba por debajo de los 50 mil puntos, ya supera esa barrera. Algo saben los financieros, algo ya están descontando”, consideró.
Contrastes
Por su parte, Cienfuegos Velasco destacó que el panorama parece propicio para la reducción de tasas de interés.
“Eso permitirá al Banco de México continuar con su política de bajar la tasa de referencia, lo cual es muy importante. No tendrá un impacto inmediato, pero a mediano plazo podríamos ver una reducción en las tasas de créditos hipotecarios y automotrices. Si alguien está considerando comprar un auto, recomendaría esperar un poco a que la tasa de interés baje”, sugirió.
Sin embargo, advirtió que los datos sobre la actividad económica son preocupantes, ya que los indicadores muestran una desaceleración.
“En octubre, la inversión pública cayó un 18.3 por ciento respecto al mismo mes del año anterior, mientras que la inversión privada disminuyó un 0.5 por ciento. Este año, el presupuesto muestra una reducción, ya que habíamos alcanzado un déficit peligroso del 6 % del PIB, algo que no veíamos desde los años 80. Esto tiene un costo en términos de austeridad presupuestal”, explicó.
Aranceles
Villegas Orpinela señaló que las importaciones y exportaciones representan una parte importante de los ingresos del país y, según cálculos preliminares, un arancel del 25 por ciento podría llevar el tipo de cambio a 25 pesos por dólar.
“Si eso sucede, veremos un freno significativo en la economía mexicana, ya que estamos en una etapa de adquisición de bienes de capital en dólares. Esto encarecería la renovación de la planta productiva en el país, generando un impacto considerable si los aranceles se mantienen en esos niveles”, advirtió.
Cienfuegos Velasco, en cambio, sugirió esperar a ver si los aranceles se aplican y si serán permanentes o temporales.
“No me preocupa tanto porque México está fuertemente integrado a la cadena de valor de Estados Unidos y es un gran productor de bienes intermedios. Sectores como el automotriz y el agroalimentario dependen de nuestra producción. En este escenario geopolítico, el eje central del análisis debería ser el conflicto comercial entre China y Estados Unidos. México podría verse afectado, pero en menor medida que China”, explicó.
Plan México
Finalmente, Villegas Orpinela habló sobre los objetivos del Plan México, que busca posicionar a México entre las diez economías más grandes del mundo mediante el fortalecimiento del mercado interno y la participación internacional.
Entre sus metas, mencionó la generación de 1.5 millones de empleos adicionales en manufactura especializada y sectores estratégicos, así como el impulso a la producción nacional. Se espera que el 50 por ciento de la proveeduría y el consumo nacional en sectores como textil, mobiliario y juguetes sean de origen mexicano, además de incrementar el contenido nacional en industrias como la automotriz, aeroespacial, semiconductores, química y farmacéutica.
“Soy optimista. Creo que este plan marca un punto de inflexión. Veníamos de una etapa en la que solo escuchábamos sobre la desaparición de organismos y medidas restrictivas para el crecimiento. Ahora vemos un esfuerzo conjunto entre la presidenta y el sector empresarial, algo muy distinto al plan de industrialización anterior. Que el sector privado respalde y empuje este plan es una señal positiva”, concluyó.