Jesús Alberto Rubio//
Con todo y que el contexto de la nueva realidad pandémica provocada por la covid-19 ha modificado y condicionado el trabajo educativo universitario, éste no se ha detenido y avanza vía diversas estrategias de enseñanza virtual y presencial en la Universidad de Sonora, afirmaron los académicos Arturo Ordaz Álvarez, presidente de la Academia de Administración Pública e Hiram Félix Rosas, coordinador de la Maestría en Enseñanza de la Historia en el Departamento de Historia y Antropología.
Lo relevante, dijeron, es que la labor académica ha estado vigente e inclusive habiéndose posibilitado en su momento la continuidad del trabajo en laboratorios y proyectos de investigación con estricto apego a las medidas sanitarias.
“La experiencia acumulada en el contexto actual de la contingencia sanitaria en el proceso educativo universitario virtual y presencial y el uso de las tecnologías disponibles para posibilitar el trabajo docente, ha tenido efectos positivos dentro y fuera del aula, reiteraron.
Arturo Ordaz Álvarez, profesor de la Licenciatura en Administración Pública dijo que sin duda alguna esa experiencia académica les ha hecho adquirir nuevas competencias en relación con la educación a distancia y el uso eficiente de las tecnologías de la información y la comunicación, situación que antes de la pandemia ya se encontraba a la vuelta de la esquina y que la pandemia apresuró su presencia en las instituciones educativas.
Reconoció que el contexto pandémico en el que por meses han realizado las labores académicas, les ha requerido poner atención a las estrategias e instrumentos empleados en su trabajo con estudiantes y profesores.
“Se han revalorado estos medios educativos y se les ha dado un papel más significativo en la formación integral de estudiantes, asumiéndolos con un mayor nivel de conciencia, ya que la educación a distancia y la híbrida representan hoy en día una alternativa relevante para el futuro de la educación mundial.
Disposiciones institucionales
Ordaz Álvarez hizo mención a las disposiciones institucionales para atender la grave situación que se ha vivido desde principios del año 2000, mismas que contextualizan el quehacer cotidiano realizado durante este tiempo, con el propósito de dar cumplimiento a las labores que los académicos realizan para atender los propósitos de toda institución de educación superior.
“La planeación académica semestral de los cursos ha permitido avanzar en el desarrollo de los programas educativos”, precisó, dando a conocer como a través del portal de la Universidad de Sonora la comunidad universitaria, cuenta con el acceso virtual a múltiples servicios, como el Sistema Virtual de Enlace Académico (Sivea) mediante el cual estudiantes y profesores, cuentan con un punto de encuentro para interactuar sobre las materias, información y materiales de apoyo, pase de lista, foro, y la planeación y entrega de tareas Dicha tecnología resultó de mucha utilidad en el tránsito al periodo de la pandemia, afirmó.
La comunicación por correo electrónico, por teléfono celular y por WhatsApp, añadió, han sido medios empleados de manera común para mantener el contacto y comunicación con los estudiantes. Por su disponibilidad e inmediatez, dijo que esas herramientas han permitido informar sobre las disposiciones universitarias y programar las acciones con las cuales concluir satisfactoriamente cada semestre.
El trabajo académico en la nueva realidad
Subrayó que el reto de la capacitación en esas tecnologías era una exigencia para cumplir satisfactoriamente con las labores académicas, incluyendo también las plataformas Microsoft Teams y Zoom, lo que propició que se convirtieran en un apoyo fundamental en las labores de docencia y el trabajo colaborativo virtual.
Arturo Ordaz dijo que en el caso particular de la creación de los grupos de Teams ocurrió de manera relativamente sencilla ya que la plataforma está ligada a la base de datos que la Universidad tiene de la comunidad estudiantil. También se tiene conectividad para transmitir en vivo mediante Facebook Live, agregó.
Hizo referencia a que el empleo del correo electrónico, teléfono celular, WhatsApp y el Sivea, plataforma tecnológica que brinda un espacio común para que los docentes compartan e intercambien conocimientos con sus alumnos a través de aplicaciones y actividades en Internet durante el desarrollo de la materia en el semestre, siguen empleándose como medios de comunicación e información.
“La educación a distancia y la híbrida en todos sus niveles representan hoy en día una alternativa relevante para el futuro de la educación mundial; por ello tiene que ser reflexionada y asumir políticas que retomen la experiencia que se está viviendo”, expresó.
Producción intelectual
Estableció que la producción intelectual que se genera en las universidades permea todos los espacios en los que se desenvuelve el ser humano, afirmando que profesores e investigadores deben continuar reflexionando sobre la crisis pandémica que vivimos, sobre, su origen, desarrollo y los efectos generados.
No en balde, dijo que los condicionamientos impuestos por la pandemia hicieron que en las instituciones educativas se pensara en la mejor forma de dar continuidad a la formación de estudiantes y a la investigación y divulgación de la ciencia y la tecnología. “Es el momento de seguir revisando estos problemas y soluciones con el filtro de lo vivido, determinar qué nos queda y debemos aprovechar y qué es necesario desarrollar para mejorar la labor educativa en el corto y mediano plazo.
“Hoy nos toca impulsar la revaloración de lo que hacemos en nuestro trabajo cotidiano, de la planeación educativa, del tiempo y espacio en el que realizamos nuestra labor, sobre las nuevas prácticas y estrategias educativas. De manera más concreta, establecer nuevas formas de interactuar y revalorar las tecnologías que se han convertido en medios significativos en nuestro vínculo con alumnos, académicos, con las mismas autoridades educativas, con el gobierno y con la sociedad en general”, concluyó.
Medición del aprendizaje. Hiram Félix Rosas
Uno de déficits en la investigación acerca de los procesos educativos está en la adecuada medición del aprendizaje, lo cual evidentemente nos coloca en desventaja para valorar y comprender los efectos de la contingencia sanitaria en los distintos niveles escolares, afirmó por su parte Hiram Félix Rosas.
No obstante, dijo, se puede señalar que la agudización de las desigualdades es un asunto que cobró relevancia a partir de marzo de 2020.
“El problema ya estaba ahí como condicionante, pero la presencia pandémica de la covid-19 lo evidenció y nos muestra la diversa serie de elementos contextuales que influyen en el aprendizaje”, indicó.
Planteó que ante la pregunta directa si la pandemia ha provocado un retroceso en los procesos de enseñanza y aprendizaje, podemos tener dos respuestas: una inmediata y otra de largo aliento.
“En corto, es evidente que las acciones diferenciadas ante el nuevo entorno educativo generan desigualdad y por lo mismo retroceso, al menos para los sectores desprovistos de los elementos básicos para el nuevo escenario”, dijo.
Sin embargo, Félix Rosas señaló que, analizada como proceso, esa experiencia puede derivar en condiciones educativas favorables, especialmente si se pone la mira en la mejora de las escuelas y espacios públicos.
“Es aquí donde podemos garantizar el acceso equitativo a la educación y con ello atacar una parte de los problemas estructurales que condicionan la educación y formación ciudadana”, sostuvo.