Con una disertación acerca del enfoque de los derechos humanos en la educación como una estrategia para la deconstrucción social, inició la III Jornada Educativa Agentes de cambio: encontrando soluciones a los desafíos de hoy y mañana, en la Unidad Regional Sur (URS) de la Universidad de Sonora.
En el inicio de la actividad organizada por el Departamento de Ciencias Sociales del campus Navojoa, la académica María del Rosario Molina González destacó que son muy importantes las carreras con alta carga humanística que se ofertan en la Institución, ya que permiten incidir en diversas temáticas de carácter necesario e importantes para la sociedad.
“Comparto esta intersección que se da entre los derechos humanos y la educación, cómo éstas tienen que ser una estrategia para poder incidir en una transformación, en una deconstrucción social; éste es un término muy filosófico que traemos al contexto de las ciencias sociales, en este ánimo de conseguir el cambio de fondo, de hacer rupturas y cuestionar las formas en las que estamos para poder ser un eje transformador”, puntualizó.
Durante su conferencia, la investigadora de la URS subrayó tres ejes temáticos sustantivos: la intersección de la educación y los derechos humanos, la educación en derechos y espacios para deconstruir el tejido social, y las oportunidades para educar a partir de los derechos humanos.
“Debemos tratar de encontrar esa intersección porque finalmente nos unirá desde el marco normativo, la constitución y presupuestos que la propia ley de educación, que será la columna vertebral para el quehacer del trabajo educativo, va a encontrar esa intersección.
“La comunidad internacional se ha unido a partir de definir objetivos y metas a alcanzar, que implica entonces un esfuerzo por parte del Estado y de todos los actores de las instituciones públicas para poder incidir en este contexto de deconstruir cómo estamos como sociedad”, señaló.
Molina González enfatizó que la Universidad de Sonora tiene que responder al ejercicio de responsabilidad social y cimbrar no solamente un currículum formal a partir del modelo 2030 que habrá de dirigir a la máter, sino además cimbrar un currículum oculto y las prácticas que desde el trabajo cotidiano se gestan en la institución y que finalmente se pueda ejercer un enfoque transformador.
“Una educación de calidad va a plantear el concepto de que no solamente se tienen estos conocimientos teóricos y prácticos, sino que tenemos promover este desarrollo sostenible, que no es solamente pensar en las cuestiones disciplinarias, sino también en que somos un ciudadano del mundo, tenemos que ejercer en el contexto de nuestro entorno social y natural”, precisó.
Por su parte, el vicerrector Jesús Alfredo Rosas Rodríguez celebró que se generen estos espacios de análisis y debate para que estudiantes, académicos y la sociedad en general puedan conocer nuevas herramientas pedagógicas y estrategias interactivas.
“Los académicos e incluso nuestros egresados se pueden convertir en agentes de cambio y realmente ser unos entes transformadores en nuestra sociedad, que mucho se requiere ahorita sobre todo en los tiempos actuales donde hay que sacar, de los grandes retos y adversidades que estamos viviendo, los aspectos positivos para salir adelante”, añadió.