Docentes del Departamento de Ciencias Químico Biológicas coincidieron en señalar que fue difícil enseñar con el cambio obligado del sistema de enseñanza tradicional-presencial, al híbrido y virtual.
María Alma Guadalupe Corella Marueño, Alejandro Monserrat García Alegría y Jhovana Pérez Martínez hablaron de su experiencia, ya de tres meses, de la impartición de clases en línea y manifestaron que sí hubo serios inconvenientes y dificultades, tanto para los docentes, como para los propios alumnos.
Alejandro Monserrat García Alegría, profesor investigador del departamento, comentó que fue difícil adaptarse a un nuevo esquema, primero, porque no había capacitación previa y desconocimiento de todas las herramientas que podían facilitar la tarea.
“A muchos nos agarró sin esa capacitación, sin las herramientas para los sistemas virtuales o híbridos, fue un tanto traumático, porque no sabíamos exactamente cómo llegar a nuestros estudiantes en ese modo de enseñanza, y a pesar de que ellos -los jóvenes- nos llevan un mundo de distancia en el manejo de las nuevas tecnologías”, expresó.
Para la docente María Alma Guadalupe Corella Marueño, señaló que en la enseñanza de la ciencia, el cambio que se dio en el sistema de enseñanza fue mucho más impactante, pues no es lo mismo, no ha sido lo mismo.
“Realmente ha sido complicado, sobre todo en los cursos que se deben llevar en laboratorios y de manera práctica. Antes de la pandemia, vivíamos a prisa, con muchas exigencias y estábamos preparándonos porque sabíamos que las nuevas tecnologías eran muy importantes para el momento de enseñar la ciencia.
“A la hora de que la OMS declaró la pandemia en el 2020, nos vimos en la necesidad de adoptar estas tecnologías, pero de un día para otro no podíamos volvernos especialistas; tuvimos que capacitarnos y nos costó horas de trabajo, mucho esfuerzo y los estudiantes nos llevaban cierta ventaja”, apuntó.
Añadió que en algunas ocasiones fueron los mismos estudiantes los que les ayudaron a resolver problemas con la tecnología y hasta les dijeron cómo usar ciertas herramientas. “Hubo ventajas y desventajas, la universidad nos ha capacitado y hemos avanzado tratando de motivar a los estudiantes, pero para ellos tampoco a ha sido fácil. Ellos no estaban capacitados para buscar información científica”.
Para la académica Jhovana Pérez Martínez, impartir clases en tiempo de pandemia ha sido difícil pues se ha intentado, en forma virtual y a distancia, enseñar conocimientos que no se puede sin utilizar las herramientas y estrategias de una clase de forma presencial.
“Tuvimos que cambiar toda la dinámica, sobre todo en las clases que son cien por ciento prácticas. Es muy complicado, pues este semestre me tocó impartir laboratorios de química general y química inorgánica, e impartirlos en un ambiente dig8ital, es bastante complejo, pues cómo le explicas a un estudiante lo que es una síntesis de un cristal si no se tiene la infraestructura de un laboratorio en casa”, precisó.
García Alegría dijo que en ocasiones, platicó con los alumnos para saber, para preguntarles sobre cómo se sentían en estas condiciones de trabajo académico y ellos manifestaban sentirse incómodos y desanimados, pues creían que les estábamos exigiendo más de lo que se les pedía en época presencial.
“Esto porque todos los maestros estábamos haciendo lo mismo al utilizar las plataformas e impartir las clases, dejar las grabaciones, improvisar ejercicios de laboratorio, pero tratando de sacar adelante la materia.
“Y ellos manifestaban su desánimo a pesar de llevarnos años luz en el uso de las tecnologías. Sentían cansancio, desánimo”, señaló, mientas que la académica Corella Marueño, reiteró que los jóvenes se desanimaron al grado de que algunos de ellos optaron por dejar la carrera.
“Así como hay ventajas, en este tipo de enseñanza híbrida, hay muchas desventajas para los que trabajan con alumnos con capacidades diferentes, pues depende de la capacitación del maestro, la motivación para que no pierdan el interés, además que para muchos, las condiciones socioeconómicas no les favorecieron.
“Muchos tuvieron que regresar a su lugar de origen donde no encontraron las condiciones indispensables para conectarse, para continuar con sus clases y mejor desertaron”, argumento.
María Alma Guadalupe Corella Marueño, Alejandro Monserrat García Alegría y Jhovana Pérez Martínez fueron invitados a compartir sus experiencias en el programa de A Ciencia Cierta que se transmite por Radio Universidad los martes a las 9:00 horas, y es conducido por Narciso Navarro Gómez, Coordinador del Programa de Divulgación y Difusión Científica/Tecnológica.