Paula Trespalacios Argain//
El cómo debe ser la formación académica después del covid, y el planteamiento de nuevos desafíos para los futuros administradores, fue el tema de análisis en el panel: Los retos del administrador en el futuro inmediato, en el que participaron los académicos Marielos Monterde Valenzuela y Gilberto Peña, en el marco del Congreso Internacional de Administración 2.0.
Moderado por el presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Administración, Jesús Román Gutiérrez, se ofreció un foro en el que especialistas hablaron de la nueva realidad y necesidades.
En su participación, Monterde Valenzuela, quien también es secretaria del Colegio Nacional de Licenciados en Administración, expuso el cómo debe ser la formación académica después del covid, ante lo que destacó que los modelos de negocios se consideran ahora digitales, con inteligencia artificial y fundamentados en el internet de las cosas.
“Esto nos implica como profesionistas el tener una visión de futuro para atender esos nuevos problemas de la humanidad; los clientes, empresas, usuarios, todos los que participamos en una cadena de valor estamos inmersos en esta innovación. También la crisis ambiental llevó a re pensar los modelos de negocios actuales, nos obligó a dirigirnos a los negocios consientes”, expresó.
Sobre los negocios consientes, indicó son una propuesta que parte de un propósito superior que no es ganar dinero a costa de lo que sea, que integran a todos sus grupos de intereses, que establecen una cultura y gestión consiente de los recursos del planeta.
Enumeró en los cambios inmediatos la comunicación interior y exterior en las empresas, la restructuración de economía interna, innovación continua y disruptiva, digitalización de la empresa, cambios culturales y nuevas inversiones.
A partir del 2022 comentó que los nuevos administradores deben tener un perfil con más habilidad de comunicación, dominio tecnológico, emprendimiento y manejo de idiomas; mientras que los desafíos serán revertir el individualismo, inspirar y empoderar, tener un pensamiento global, trabajar en equipo, liderazgo y saber anticiparse.
Por su parte el académico Gilberto Peña habló del nuevo paradigma y sus retos para el administrador.
Aseguró que hay cuatro áreas de oportunidad: adaptarse a las nuevas tecnologías y redes sociales, poner a las personas en el centro; equilibrar el talento humano y las nuevas formas de trabajo y adaptar el modelo de negocio a la nueva realidad.
“Hay que moverse rápido para adaptarnos y evolucionar, hacer de nuestras empresas algo deseable, hacerla nuestra segunda casa, evitar esa alta rotación que se da, cuidando en todo momento la competitividad y la calidad superior de los productos y servicios mediante la mejora continua”, consideró.
Coincidió en la necesidad de capacidad de comunicación y aplicación de las nuevas tecnologías.