Elías Quijada//

Los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales tienen grandes repercusiones en las personas y en sus familias, no sólo desde el punto de vista económico, sino también en lo que respecta a su bienestar físico y emocional a corto y a largo plazo, así lo mencionó Amina Marín Martínez, profesora del Departamento de Ingeniería Industrial de la Universidad de Sonora.

Al conmemorarse hoy el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, que este año tiene como lema Actuar juntos para construir una cultura de la seguridad y salud positiva, Marín Martínez dijo que los accidentes de trabajo impactan en las empresas al afectar la productividad, provocar interrupciones en los procesos de producción, obstaculizar la competitividad y dañar la reputación de las empresas a lo largo de las cadenas de suministro, con consecuencias para la economía y la sociedad.

De acuerdo a cifras de la Organización Internacional del Trabajo 2.7 millones de trabajadores mueren cada año en accidentes derivados del trabajo, de los cuales 2.4 millones están relacionadas con enfermedades profesionales. Se estima que los días de trabajo perdidos representan cerca del 4% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial y en algunos países hasta el 6% o más.

Aseguró que cada uno de nosotros somos responsable de frenar las muertes y lesiones en el trabajo; el gobierno debe proporcionar la infraestructura legal y de servicios necesarios para garantizar que los trabajadores continúen empleados y que las empresas prosperen.

“Los empleadores deben garantizar que el entorno laboral sea seguro y saludable y los trabajadores, deben trabajar de manera segura y protegerse y no poner en peligro a otros, además de conocer sus derechos y participar en la implementación de medidas preventivas”, agregó.

El mundo del trabajo está pasando por cambios profundos entre los cuales se destaca la tecnología, la demografía, el desarrollo sostenible que incluye el cambio climático y la organización en el trabajo. Estos cambios traerán consigo nuevos desafíos y oportunidades para la seguridad y la salud de los trabajadores en el mundo, comentó.

La docente universitaria invitó a toda la comunidad universitaria a participar activamente en las acciones que a nivel local, nacional e internacional se generan en el marco de este día que es un acontecimiento de celebración, pero también un día para conmemorar a los trabajadores fallecidos y lesionados.

El bienestar laboral y la pandemia
En el portal de la Organización de las Naciones Unidas, se establece que durante la pandemia de la covid 19, se observó que contar con un sistema de seguridad y salud en el trabajo sólido, que incluya una participación efectiva de los gobiernos, los empleadores, los trabajadores, los actores de la salud pública y todas las partes relevantes a nivel nacional y empresarial, ha sido decisivo para proteger los entornos de trabajo y salvaguardar la seguridad y la salud de los trabajadores.

El diálogo entre gobiernos y entidades sociales no sólo contribuye a mejorar las políticas y estrategias en materia de seguridad y salud en el trabajo, sino que también es esencial para fomentar la apropiación y el compromiso, facilitando el camino para su rápida y más eficaz puesta en práctica.

En el lugar de trabajo, una cultura de seguridad inclusiva es aquella en la que tanto la dirección como los trabajadores valoran y promueven el derecho a un entorno de trabajo seguro y saludable; de esta forma, los trabajadores se sienten cómodos planteando sus preocupaciones sobre posibles riesgos o peligros en el lugar de trabajo y la dirección colabora con ellos para encontrar soluciones adecuadas, eficaces y sostenibles. Para ello es necesario establecer una comunicación abierta y un diálogo basado en la confianza y el respeto mutuo.

Mientras seguimos viviendo una crisis sanitaria mundial y nos enfrentamos a continuos riesgos en materia de SST en el mundo laboral, debemos seguir avanzando en la construcción de una cultura de seguridad y salud sólida a todos los niveles.

El 28 de abril de cada año se celebra el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo con el fin de promover la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales en todo el mundo.

La celebración que inició en 2003 considera una campaña de sensibilización impulsada por la Organización Internacional del Trabajo y que está destinada a centrar la atención internacional sobre la dimensión del problema de las lesiones, enfermedades y muertes relacionadas con el trabajo, además de visibilizar las nuevas tendencias en el ámbito de la seguridad y la salud en el trabajo.

Este año la celebración se centra en potenciar el diálogo social hacia una cultura de la seguridad y la salud, por ello la campaña de este año lleva el lema “Actuar juntos para construir una cultura de seguridad y salud positiva”.