Jesús Alberto Rubio/

Una invitación a que con un criterio abierto descubran lo que verdaderamente les gusta de la ciencia, haciéndolo siempre con mucha pasión y pensando en que de manera conjunta pueden contribuir a tener un futuro deseable del planeta, hizo el Doctor Honoris Causa, Mario Molina Pasquel y Henríquez, a estudiantes de la Maestría en Sustentabilidad de la Universidad de Sonora.

En su reciente visita a la Universidad de Sonora, y acompañado del académico Luis Eduardo Velázquez Contreras, coordinador del Posgrado, los felicitó por formarse en un campo disciplinar relacionado de manera íntima con el medio ambiente y la sustentabilidad que hoy tanto reclama de su participación y responsabilidad profesional para mitigar y evitar sus graves efectos en el planeta.

En reunión a la que también asistieron académicos de la Maestría, les dijo que el mundo está preocupado por los efectos del cambio climático, especialmente los impactos y problemas que provoca el hombre y el progreso tecnológico, diciéndoles que si no atendemos este asunto atentaremos el medio ambiente y la vida humana.

El científico mexicano les recomendó continuar con el estudio, la investigación y el desarrollo de la ciencia básica y aplicada, recordándoles sobre los peligros que entraña el cambio climático, el cual les dijo consiste en el aumento de la temperatura planetaria por efecto de la actividad industrial, humana y quema de combustibles fósiles, entre otras acciones del hombre, siendo hoy un problema que dijo aún no está resuelto por la humanidad.

El Premio Nobel de Química en 1995, sostuvo en su charla que se necesita aplicar la ciencia en busca de que ésta tenga un impacto favorable en la tierra, la atmósfera y la capa de ozono.

Hizo referencia a que, con excepción del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, todos los países del orbe están comprometidos en reducir los niveles de emisiones de gases de efecto invernadero causantes del calentamiento global. “Por fortuna, en el caso del vecino país del norte, estados como California y Massachusetts, así también empresas europeas, seguimos trabajando juntos para resolver este grave problema”, advirtió.

Gran riesgo para la vida humana

“Si no se toman las medidas necesarias, habría un gran riesgo para la vida humana ya que el clima es un sistema complejo y con todo y la ciencia y la tecnología, no se pueden hacer predicciones con mucha certeza”, indicó, luego de que afortunadamente se tienen avances en esta materia luego de que 195 países firmaron en el 2016 el compromiso de lucha contra el cambio climático en el Acuerdo de Paris.

Al respecto, mencionó que se asumió ese compromiso, que consideraron prioritario, ya que la temperatura ha aumentado un grado centígrado en promedio en el planeta en los tiempos modernos, lo cual ha provocado la disminución de hielo en el Ártico, así como inundaciones, huracanes y ondas de calor por todo el globo terráqueo.

Sin embargo, a pesar de los acuerdos tomados, volvió a subrayar la latente preocupación y el riesgo de que la temperatura suba más de cuatro o cinco grados centígrados, lo cual sería catastrófico en el planeta. Es por ello, planteó, resultaría una falta de responsabilidad, de ética y conciencia social enorme de aquellos mandatarios de naciones que no toman las medidas urgentes en este tema.

Comunicar a la población

En su mensaje a los estudiantes del Posgrado, el doctor Mario Molina planteó lo que él considera clave y prioritario: comunicarle este problema de manera permanente a sociedad ya que ante los extremos de clima, como huracanes, sequías y el aumento promedio de la temperatura de la superficie del planeta, el cambio climático ha resultado más preocupante de lo que originalmente se había pensado.

Puso especial énfasis en que no se ha hecho un papel importante de hacer ver este grave asunto a la población en general, siendo por ello que hay mucha gente que aún no está bien informada ni le da importancia a los efectos del cambio climático, de ahí que, reiteró, se deba empezar a actuar.

No debe dejarse a las futuras generaciones el que resuelvan el grave problema de reducir las emisiones tóxicas porque le saldrá mucho más caro a la sociedad; se tiene que insistir en que este asunto global sea más visible; se debe seguir por ese camino, reiteró.

“Desafortunadamente hoy vivimos un momento muy difícil por la diversidad de amenazas de los cambios globales del planeta y con gente que no reconoce la importancia de la ciencia, lo cual habla de que no vamos necesariamente por buen camino, Entonces, es importante que las nuevas generaciones de jóvenes le metan muchas ganas a este tema… así que, muchachos a trabajar todo lo que se pueda”, les expresó.

Les planteó en que ya más del 98 por ciento de los científicos están de acuerdo en que lo que falta es el movimiento social que permita convencer a los tomadores de decisión de los distintos gobiernos a que tomen las medidas necesarias en este urgente problema global.

Además de la energía solar y eólica, todavía está el reto de lograr su almacenamiento; incluso, hay muchos avances, desde ciencia muy fundamental y formas más eficientes de utilizarlas. “Entonces, en cada campo hay retos que están relacionados con el progreso de la ciencia y de la tecnología”, concluyó.