Paula Trespalacios Argain
El uso de biopolímeros es cada vez más cotidiano y no solo representa una tendencia actual, sino que tiene un potencial para transformar completamente sectores a un futuro cercano, así lo aseguró el académico Francisco Rodríguez Félix, quien lidera un grupo de investigación del Departamento de Investigación y Posgrado en Alimentos.
En la emisión del programa: “Alimentación, problema de nuestro tiempo”, de este jueves 5 de septiembre, el docente habló de las aplicaciones de este material y sus beneficios en lo agroindustrial y médico.
¿Qué son?
En su intervención, detalló que los biopolímeros son materiales que se obtienen de productos biológicos, como plantas, microorganismos y algunos subproductos agroalimentarios; son biodegradables y biocompatibles, lo que significa que se descomponen de manera natural sin dejar residuos tóxicos, lo que los hace seguros para aplicaciones médicas, de salud y alimentarias.
Su importancia, dijo, radica en la capacidad para ofrecer soluciones tanto sostenibles como ecológicas para diversas industrias.
“Fertilizantes de liberación prolongada, que van a mejorar la eficiencia de los cultivos y reducir el impacto ambiental que generan los fertilizantes; en el ámbito de la salud se pueden utilizar también para diferentes aplicaciones y lo que hacemos en el DIPA es el desarrollar sistemas de liberación controlada de fármacos, los cuales permiten administrar un tratamiento más eficiente y disminuir efectos secundarios.
“También permite la creación de envases activos e inteligentes que vienen a mejorar la seguridad y la calidad de los alimentos, por lo cual el uso de los biopolímeros es de crucial importancia para la industria alimentaria, en este caso nos dedicamos a aplicaciones agroindustriales”, puntualizó.
Aplicaciones
Señaló que, en su grupo de investigación, se enfocan en obtener biopolímeros a través de subproductos agroalimentarios y les han dado diferentes aplicaciones.
“Ofrecen oportunidades de desarrollo de medicamentos más efectivos y personalizados, como son los sistemas de liberación controlada que mejoran la adherencia al tratamiento y reducen los efectos secundarios; además explorar nuevas aplicaciones como el área de una agricultura de precisión y la medicina regenerativa, donde los biopolímeros juegan un papel clave en la mejora de la productividad agrícola y el desarrollo de terapias avanzadas, como la reconstrucción de tejidos.”, enlistó entre las utilidades.