En el marco del XV Aniversario de la Red Feminista Sonorense se presentó el libro En Juego nuestra Propia Historia II, autoría de Josefina Olivarría, María Elena Barreras, Leticia Burgos Y Deni Gastelum Barreras, obra cuya intención es difundir la lucha por los derechos de las mujeres y continuar con las acciones a seguir vinculadas con la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres en Sonora, (AVGM) en Sonora.
Fue la Licenciatura de Psicología de esta casa de estudios la organizadora de la actividad –el pasado 29 de septiembre– a través de las académicas Rocío Haydee Arreguín Moreno y Raffaella Fontanot Ochoa, quienes comentaron el libro teniéndose como sede el auditorio del Departamento de Psicología y Ciencias de la Comunicación.
En la ceremonia las autoras mencionaron que el libro es un esfuerzo de la Red Feminista Sonorense, “el cual es necesario por nuestra historia y la lucha de las mujeres que siguen, conociendo la normatividad la jerarquía de leyes y los derechos logrados en este tema”, planteando que su importancia “es que nuestras vidas están en juego, por nosotras y por las que ya no están en vida”.
“Resultaba frustrante saber de derechos constitucionales plagados en la insensibilidad indiferencia, inconcebibles; por ello la necesidad de visibilizar tantas argucias legales para nosotras, que fueron golpes muy duros. Sin duda, estamos ante un problema de violencia institucional”, expresaron.
En sus mensajes, incluyendo los de las comentaristas, reconocieron lo significativo que es mencionar a las mujeres ausentes en esa reunión, ya sea porque no pudieron o por haber fallecido en la lucha.
Suma de distintas actoras
“La construcción del libro constituye la suma de mujeres de distintas edades; denota las alianzas políticas dentro y fuera de las instituciones y, sobre todo, en la obra se percibe a lo largo de cada hoja la conciencia comprometida y sed del cumplimiento de la ley”, comentó Rocío Haydee Arreguín Moreno, académica de la Licenciatura en Psicología.
Dijo que del libro retoma la frase “sin feminismo, otro mundo no es posible”, así como otras que califica de importantes porque explican muy bien el sentido de la obra. “Es un insumo indispensable para la sociedad y abona sobre el tránsito ciudadano del acceso a la información y la transparencia y la rendición de cuentas de las propias instituciones”, precisó.
“Ninguna mujer en el mundo buscamos ser asesinadas”, advirtió Arreguín Moreno, señalando que la obra siembra esperanza, busca cambiar vidas y nos conmueve la impunidad que prevalece en determinados espacios institucionales y en personas.
“El libro tiene un significado para mí; divulgar con palabras, en este caso con distintas voces, un hecho, una trama, una investigación”, expresó.
Y para quienes asistimos a un evento como éste, advirtió, “nos hace reencontrar o conocer personas con los mismos intereses, hacer alianzas o simplemente tener un diálogo, que mucho hace falta, especialmente en tiempos de pandemia”.
Arreguín Moreno expresó algunas frases que le llamaron la atención: porque tenemos el derecho de vivir una vida libre de violencia, nuestras voces se levantan; sororidad se traduce en hacer pactos concretos y sinergias; las muertes por feminicidios no son tomadas en serio por las autoridades correspondientes; hay que ver la vida con las gafas moradas, con perspectiva de género; exigimos la Alerta por Violencia de Genero para las Mujeres, por mí, por ellas, por todas.
Otras fueron, añadió, tememos por nuestra vida, nuestra integridad y libertad; el principal objetivo de la AVGM es garantizar la seguridad de las niñas y mujeres; el 20% de las mujeres que hacen llamada de auxilio al 911 han muerto ; preocupa el retraso en la respuesta que hay que dar para definir una estrategia de reducción del feminicidio en Sonora; es pertinente se convoque a la sociedad civil, organismos de apoyo a mujeres y niñas víctimas de la violencia, a los órganos de derechos humanos, academia y feministas a la elaboración del marco regulatorio y modelos de atención de víctimas de violencia de género y contra las mujeres.
Comprensión y el análisis del feminismo
Por su parte, Raffaella Fontanot Ochoa, historiadora, docente, performista, investigadora y gestora cultural, dijo que hizo una lectura del libro considerándolo muy importante como fuente para la comprensión y el análisis del feminismo como un movimiento social en Sonora.
“Además, puede ser un camino para la reflexión acerca de cómo se produce el conocimiento desde una epistemología feminista”, afirmó la licenciada en Historia por nuestra casa de estudios y maestra en Ciencias Sociales por El Colegio de Sonora.
“Agradezco la oportunidad de comentar este libro porque cuando conocí su título me interesó, me atrapó y me hizo pensar en la enorme importancia de rescatar la memoria de lo que hacemos, y como mujeres, sobre todo”, indicó.
El título de En juego nuestra propia historia, comentó que encierra aspectos centrales del feminismo: “Nuestra propia historia se refiere a hablar y proponer desde una experiencia de vida que no se nos ha permitido conocer, por cierto, porque la ciencia y por ende la producción del conocimiento han sido históricamente androcéntricos”, externó en su comentario en el auditorio del Psicom.
Sostuvo que como sujetos de la ciencia “a las mujeres se les ha encasillado en el papel de subordinadas como en el resto de la sociedad, ser ayudantes de investigación, asistentes de laboratorio, antes que agentes de conocimiento, además del camino largo y difícil que han tenido que andar para convertirse en sujetas políticas y poner en la agenda pública aspectos tan importantes como decidir sobre sus vidas y cuerpos.
“En el ejercicio de escribir nuestra propia historia constatamos un rol de participación política, explicamos el mundo desde nuestro punto de vista, uno diferente y contrastante como podemos ver a través de las crónicas y testimonios de este libro que se nombran las violencias, el cómo y quiénes, el dónde y cuándo y los gobiernos, las instituciones que son patriarcales y heteronormadas”, abundó.
Estructura de la obra
El libro se compone de tres capítulos; en el primero se presentan testimonios tanto de familiares de víctimas de feminicidio como integrantes de la red feminista que observaron y participaron en el proceso para la implementación de la Alerta de violencia de género (AVG) planteando un panorama de violencia extrema contra las mujeres en Sonora, empezando por el municipio de Cajeme.
El segundo capítulo es una crónica documentada a varias voces sobre el proceso que incluyó tres solicitudes de alerta de género que implicaron un seguimiento, mesas de trabajo, monitoreo, exigencias, solicitud de revisiones etc. Por medio de una contraloría feminista que surge en el año 2019 con presencia en varios estados por la red nacional de alertistas. Una documentación detallada y precisa del proceso con una descripción del papel de todos los actores involucrados, la red feminista A.C., organizaciones de la sociedad civil (OSC), familiares de víctimas, autoridades e instituciones.
En el tercer capítulo, escriben las alertistas de dos estados: Guerrero y Querétaro donde narran sus propias experiencias en las que, por cierto, hay varias similitudes con las sentidas y vividas en Sonora.