Mientras haya un niño que desee leer, debe existir un autor que escriba literatura para niños, una editorial que publique dicho material; y es que, además, los infantes están ávidos de literatura y cuentos, consideró el escritor José Cruz Almonte Ayala, quien durante 30 años se ha dedicado a la literatura infantil.
Almonte Ayala participó en el Tercer Festival de Literatura Infantil, organizado por el Departamento de Letras y Lingüística de la Universidad de Sonora, evento que en esta edición reconoció su trabajo de tres décadas orientados también al fomento de la lectura en niños y adolescentes.
Acerca de este reconocimiento por parte de la comunidad universitaria, expresó su beneplácito y agradecimiento: “estoy muy feliz, estoy muy contento; es extraordinario que de la otra parte del país estén volteando hacia mi trabajo, y eso me hace ver que alguna decisión que tomé en mi vida de cómo expresar mi pensamiento y que elegí la parte de los libros, me confirma que fue la elección correcta”, enfatizó.
En relación con el evento, destacó el esfuerzo de los organizadores, y es que “todos los niños quieren oír un cuento, y todo los niños han salido felices de este espacio, y en todos los estados los niños están ávidos de libros… mientras hay un niño que quiere leer, debería de haber un libro, un escritor, una editorial y un esfuerzo colmando esa necesidad”, aseveró.
En muestra de agradecimiento por el homenaje realizado, el también coordinador de Desarrollo cultural, infantil y juvenil del estado de Coahuila, cedió los derechos de autor por cinco años a la Universidad de Sonora de su más reciente obra literaria para niños, El paraíso, la cual presentó por primera vez al leerla en este festival.
Se trata de “un poco en retribución al gesto amable que han tenido conmigo y esperando solamente que el esfuerzo que la Universidad de Sonora hace con festival y el mío rinda frutos”.
Recordó que su trabajo literario lo inició escribiendo poemas, “pero el público adulto no es el idóneo para la cuestión literaria, luego me propuse enseñar a leer, pero los adultos no me hacían caso y decidí en algún momento dejar de escribir literatura para adultos y me dediqué al público infantil”, dijo.
“Esto me ha llevado a hacer talleres literarios, investigaciones, escribir cuentos para niños y es lo que me tiene aquí y sigue siendo la elección correcta”, destacó.
El cuento presentado lleva como título El paraíso, y es una historia basada en una leyenda griega puesta en un contexto actual acerca de un día en que no existe la escuela. La trama se desarrolla alrededor de averiguar por qué no existe la escuela, mientras algunos niños creen que eso es el paraíso, se dan cuenta que el mundo se vuelve aburrido.