Elías Quijada
Ante la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos, el gobierno mexicano, encabezado por Claudia Sheinbaum Pardo, tendrá dos aspectos complicados que son el comercio y los asuntos migratorios, y todo dependerá de la fortaleza económica que tenga la nación azteca, consideró Héctor Guillermo Campbell Araujo.
El profesor y jefe del Departamento de Derecho de la Universidad de Sonora expresó que referente a las relaciones comerciales, México tendrá un panorama complicado porque se entrará a la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la nación anglosajona con Trump en la Casa Blanca desarrollará una política proteccionista e implementar su lema de campaña que fue “Hagamos a América más grande”.
Explicó que el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) es un acuerdo comercial que busca fortalecer los lazos económicos entre los tres países. Este tratado entró en vigor el 1 de julio de 2020 y es una actualización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
“Donald Trump se pondrá en una posición fuerte para evitar la diversificación del mercado y evitar que China entre al continente americano y que no use a México como trampolín y los decomisos registrados últimamente en México, incluyendo Sonora, pudiera ser una acción emanada de los acuerdos previstos”.
“A México le queda negociar porque hay otros elementos subyacentes que no se mencionan. El sexenio pasado sostuvo que el envío de remesas de migrantes fue un aspecto importante en la economía, pero ligarlo con el tema migratorio bajaría los envíos de las remesas; pero en una investigación periodística de Estados Unidos reveló que el 80% de las remesas vienen de regiones donde no hay mexicanos, entonces se puede dar otra lectura”, indicó.
Referente a las políticas migratorias, Campbell Araujo, dijo ante las presiones de Donald Trump, México se puede convertir en la sala de espera de muchas personas que desean concretar el sueño americano, pues representantes del gobierno electo norteamericano ya tiene platicas, no solo con México, también El Salvador para hacer un programa de contención de migrantes del Centro y Sur de América.
Precisó que el magnate aplicará políticas de mano dura, pero México va a aceptar dependiendo de que tan fuerte o débil este la economía nacional.